Verdad lo que dicen que Cuba está de moda. Pretty-pretty cubanito, rico jaibol¹.

Llevas una semana haciéndote el cabrón, papá. Cuarenta mensajes y tú… Y para que lo sepas, lo que te dejé dicho en éste último es literal; iba a poner fin a la payasada nueva ésta que inventaste, porque hasta el sueño he perdido con la expectativa.

¿Entonces ya te decidiste, señor de la vanguardiaⁱⁱ?

Tú sabes que eso no se piensa.

¡! Te noto… musical; eso es bueno. Entonces, volvemos a las andadas.

¿A las andadas? ¿A cuáles andadas? No, primo. Voy a ir a Cuba, a hacerte el favor de explorar a Virgilio, a ver si quiere fundar la ONG esa que tú dices, pero solo si antes me das una explicación más… explicada. ¿Qué hay contigo? ¿Dónde tú estás? ¿Para quién trabajas ahora? ¿Para qué fin? ¿O tú quieres que me hagan lo que le hicieron a Alan Gross?

Camilo, no te hagas el que no quiere caldo, que tú y yo sabemos que no vas a viajar a Cuba para nada de eso que acabas de decir. Vas a viajar a Cuba porque te va a salir gratis el viaje, porque te vas a buscar tus pesitos cargando como mulo, porque no te van a revisar en la aduana, porque no vas a tener que volver a doblar el lomo para poner más mosaicos de piso en el edificio ese, con la columna hecha leña como la tienes…

Yo insisto Che. ¿No me van a revisar en la aduana? ¡Devela el misterio! ¿O sea que, la tal ONG, la va a fundar el gobierno de Cuba pero en los Estados Unidos, con fachada de organización opositora? ¿Es así o me equivoco?

Por ahí va la cosa. Panamá, Camilo, Panamá. Aprendimos mucho de Panamá y Panamá no se puede repetir, así que, a partir de ahora, la revolución ha decidido crear su propia contrarrevolución, entre otras cosas con vistas a las próximas Cumbres de las Américas.

¿?

Solo que ésta vez vamos a trabajar fino. Los Abel Prieto, los Miguel Barnet, ya fueron desagraviados con un homenaje público y ya deben haber sido indemnizados en privado, con todo y garantías de que no volverán a recibir misiones de esa índoleⁱⁱⁱ. Para la siguiente Cumbre de la OEA, se espera que ya la revolución tenga su propio lobby dentro de la contrarrevolución. No serán la UNEAC, ni el Consejo de Iglesias ni el Centro Martin Luther King los encargados de boicotear a los contrarrevolucionarios, no, sino una serie de nuevas ONG creadas y financiadas por nosotros, siguiendo el abc de la contrarrevolución.

¡!

Dime algo, pregúntame.

Espera, déjame digerir, que no esperaba que fueras tan directo. Es más, dame detalles de cómo le entro a Virgilio. ¡Él no va a aceptar trabajar para ustedes, eso de más está decirlo!

¿Y quién dice que tiene que trabajar para nosotros? Él hará exactamente lo que hace cualquier contrarrevolucionario. Recibirá apoyo y financiamiento de organizaciones del exterior para hacer reuniones en su casa, hará declaraciones a la prensa independiente y a la prensa capitalista, recogerá firmas para los proyectos que invente y para firmar cuanto proyecto le dé a firmar cualquier otro grupúsculo, también irá al servicio de Internet gratis que brindan las embajadas para que se comunique contigo, en resumen que socializará en ese mundillo pero esta vez con rango, no como un simpatizante del montón con los ojos vendados.

¡!

Será un activista casi normal bajo la vigilancia perenne de la Asociación de Combatientes^iv. Incluso los amigos y los simpatizantes seguirán siendo acosados, pero, en cuestiones de especial sensibilidad para la imagen de la revolución, como lo es el tema de la inserción de Cuba en el mundo, se plegará a la “línea” que le dictemos nosotros. O sea, que le dicte la “ONG madre”^v de la que mama.

La ONG pantalla querrás decir.

Exacto.

No va a funcionar.

¿Por qué?

Porque Virgilio tiene criterio propio. Si esa ONG y las demás van a ser dirigidas por el MININT, por los energúmenos del MININT, van a meter la pata más temprano que tarde, al menos con Virgilio que se dará cuenta; hazme caso a mí.

No se dará cuenta porque ningún energúmeno estará detrás de las ONGs que se están creando para tal fin. Detrás de la Operación Panamá se supone que habrán oficiales realmente preparados, con probados conocimientos acerca de ese mundo. A mí, por ejemplo, de algo me valió investigar por mi cuenta en las anteriores operaciones en las que estuve involucrado. Escuchar Radio Martí a falta de Internet para conocer mejor al enemigo, por ejemplo. Ser creativo respecto a la manera menos escandalosa de reprimir, no acatar literalmente las órdenes de los superiores de la época de la barbarie, persuadirlos de lo contrario de vez en cuando sin importarme el buscarme problemas… Por eso cuando empezaron a captar oficiales para la Operación Panamá, yo fui de los primeros en ser consultados. Al menos eso me dijo el oficial inmediato superior mío en ésta misión.

¿Operación Panamá?

Sí, la idea surge a partir de lo ocurrido en Panamá, por eso el nombre.

Y tú me lo cuentas así, sin más, por mi cara linda. ¿Y si yo me voy de lengua?

Si te vas de lengua igual nos harás un favor, porque, entre las diferentes nuevas organizaciones que surjan, se piensa fomentar la desconfianza con las viejas como una de las vías para robarles espacio. Por otro lado, yéndote de lengua habrás demostrado no estar apto para la misión al quemarte tempranamente y así nos ahorrarás tiempo. Además, ¿quién te lo va a creer? ¿Quién eres tú? ¿Quién soy yo, quién me conoce a mí, quién se atreverá a dar una noticia tan mal fundamentada? ¡Ah Camilo! ¿Quieres o no quieres colaborar con la transición de la patria?

¿A porque el fin de ésta cosa es una transición, no es el famoso cambiar para que nada cambie de siempre?

El fin es la transición, Camilo, la única transición posible, dado el contexto. Como una Realpolitik. ¿Sabes lo que es la Realpolitik?

¿Y la Ostpolitik?

¿De qué hablas ahora, mijo?

Consulta la Wikipedia, Camilo. Se trata de buscar la mejor situación posible, ante un gobierno contrario o abiertamente hostil. Por ahí va la cosa.

Digamos que la transición se impone –para hacerme entender. Venezuela y Rusia están en quiebra, China es un arma de doble filo que hay que evitar, y nuestro General no quiere otro Período Especial, entre otras cosas porque no le queda tiempo de vida para hacerle frente, y no quiere dejar ese arrastre a los hijos que heredarán el gobierno. Como a inicios de los noventa, la brújula vuelve a orientarse hacia Europa y hacia los Estados Unidos, y hay que aprovechar a Obama y a los Demócratas. Panamá fue una carrera ganada, PERO, con una piedra en el zapato en la que desde ya hay que trabajar para reducir los daños colaterales, porque, eliminarse lo que se dice eliminarse, nunca se va a eliminar, sobre todo ahora que el horizonte se nubla con los Republicanos y el Marco Rubio. En fin que la piedra en el zapato, o sea la dichosa sociedad civil a la que nosotros llamamos contrarrevolución, no puede continuar siendo enfrentada abiertamente porque la circunstancia cambió: Panamá fue su tumba. A partir de ahora las ideas de tipos como yo –antes una especie de reaccionario dentro de las filas del MININT- van a ser tomadas en cuenta.

¿Una castropolitk?

Digamos que sí. Si eres observador, te habrás fijado que la revolución salió airosa de Panamá con el estrechón de manos entre Obama y el General. El simbolismo de ese acto sigue trayéndonos frutos: visitas de presidentes europeos, de artistas famosos, posiciones encontradas en el congreso norteamericano, con nuestros enemigos a la defensiva.

Obama que quiere visitar Cuba.

Y el General quiere conocer Miami. Y si te fijas bien, le robamos protagonismo a la contrarrevolución a pesar de todo lo mal que actuamos. Lo que ha estado pasando con las Damas de Blanco los últimos domingos, en otra época, hubiera sido la noticia^vi.

Che, hablemos de Virgilio. ¿Cómo enfoco el asunto?

Le vas a decir que, en un acto patriótico al que asististe en el Versalles^vii, te presentaron un filántropo interesado en colaborar con la causa de la democracia cubana. O mejor dile que con la transición, que se ajusta más a la realidad. Así: conociste a un filántropo interesado en colaborar con la causa de la transición cubana.

¿Transición a la cubana le digo?

No. Esto es entre tú y yo. A medida que pase el tiempo, Virgilio percibirá que nuestro filántropo va a priorizar el tema de la transición, relegando el asunto de la democracia y los derechos humanos para una hipotética segunda etapa del proyecto según la circunstancia. Ergo: la prioridad será la transición; lo otro vendrá después.

¿Y el susodicho filántropo a qué organización pertenece o pertenecerá?

Dile que a Council on Foreign Relations (CFR)

¿Y eso qué es?

Una organización norteamericana no partidista, dedicada a la política exterior, más o menos tanques pensantes. Cuando te haga esa pregunta lo instas a buscar en la Wikipedia, le dejas caer el nombrecito de George Soros, por asociación irá a la revista que publica esa gente, se topará con la importancia e influencia que ha tenido y sigue teniendo la misma, y no podrá resistir la tentación.

¿La tentación de qué?

¿Cómo de qué? La tentación de estar vinculado al medio informativo que, por ejemplo, promovió la política de contención que vertebró la política exterior de los Estados Unidos durante la Guerra Fría.

¡!

La misma revista que publicó el famoso artículo de Samuel Huntington: el Choque de civilizaciones. La revista en la que la ucraniana Yuliya Timoshenko predijo lo que está pasando hoy en Ucrania con la política expansionista de Putin. Tú solo háblale del Versalles, de la actividad en la que conociste al tipo. Dile que se llama George Canosa, y que es norteamericano de ascendencia cubana.

¿George Canosa?

Sí. Un apellido cuya sola mención huela a anticastrismo. Según tu apreciación, el tal Canosa es un empresario con el tiempo contado. Según escuchaste decir averiguando por tu cuenta, es un tipo que se decanta por la filantropía porque le gusta, sí, pero, también desde el punto de vista práctico, se decanta por la posibilidad de tener decisiones directas sobre el destino de los impuestos que paga. Por ahí va la cosa.

Dime algo.

¿Qué te voy a decir? Tengo que digerir todo esto. Fabricar bien la mentira que Virgilio no es bobo, acuérdate que se coge más rápido a un mentiroso que a un ciego.

Camilo, Virgilio va a aceptar. Contamos con un capital para iniciar el proyecto. Un proyecto que nos permitirá ir buscando mecenas, que puede que, cuando vengamos a ver, el proyecto puede que hasta se haga sustentable, y entonces los mismos americanos sean los que financien al MININT.

Pero mis principios Che…

¿Qué principios de qué, Camilo? La revolución va a darles, a ti y a Virgilio, un arma para que luchen contra ella en igualdad de condiciones; no puede ser más justa. Ahora bien, de la capacidad de ustedes, o mejor de nosotros, depende el influir en mayor o menor medida, en la dirección que tomará el futuro de Cuba. Tú solo dile a Virgilio lo acordado. Hay un filántropo, George Canosa, dispuesto a apoyar ONGs en Cuba.

¿Cuál ONG?

La que invente Virgilio. Eso déjaselo a él. Ya el señor Canosa se encargará de aprobar o no el proyecto y le pondrá los límites que estipule, que no van a ser muchos, eso te lo garantizo. En el camino él irá conociendo al señor Canosa; le iremos dando forma al señor Canosa, que por supuesto será mi alter ego. Tú solo hazle la propuesta como si le propusieras una aventura desconocida, que te digo yo que va a aceptar. Lo demás déjaselo al tiempo. ¿Ok?

Ok.

Bueno, voy a cerrar. Enviaré un dinero a tu cuenta para el viaje. Recuerda no pasarte del peso en el equipaje. Y recuerda que confío en ti, que mi pellejo, mi prestigio, ahora, están en tus manos.